Título: Murió por los pelos
Autor: Nacho Docavo
Editorial: Ypsilón
Nº de Páginas: 148 (aproximandamente)
ASIN: B00NF5K0F2
Este libro me lo ofreció la editorial
Ypsilon y como me llamó la atención su argumento, decidí convocar
un concurso y una lectura conjunta. Ya os digo que el libro ha
superado todas mis expectativas y me he divertido mucho con él. Os
paso a contar:
NACHO DOCAVO, EL AUTOR:
Madrid 1955. Antropólogo de profesión ha recorrido el mundo en busca de paradojas etnográficas. De sus increíbles viajes y experiencias han surgido las historias que le han llevado a publicar, a lo largo de los últimos veinte años, una quincena de libros con diversas editoriales, entre los que destacan La inteligencia del agua y la serie juvenil Las Aventuras de Camaleón.
ARGUMENTO:
La delirante historia de Manuel Cantera, un funcionario sin funciones que se verá envuelto en una trama de calvos y asesinatos de la que sólo podrá salir airoso usando su imaginación y su extraordinaria capacidad de improvisar.
Cantera tiene que hacerse con la fórmula que los jíbaros utilizan para reducir las cabezas de sus enemigos, una poción que curará para siempre la alopecia y que promete beneficios millonarios a aquellos que obtengan su patente.
Para conseguirla tendrá que viajar a lo más recóndito de la selva de Ecuador en busca de la comunidad indígena que ya en el pasado le acogió y que conserva el secreto ancestral que evita la caída del cabello. Una vez de vuelta en España, Manuel deberá esquivar todas las trampas a las que le somete una multinacional sin escrúpulos, la misma que ha raptado a su novia y que amenaza con hacerla desaparecer...
IMPRESIONES:
Este libro lo único que pretende es
entretener y os aseguro que lo consigue. Es una historia divertida,
delirante y muy alocada. Quizá demasiado, pero hay que tomarse las
cosas con humor, que en este libro de eso hay mucho. No voy a negar
que sea un tanto disparatada, pero ya os digo que esta novela va de
eso: de disparates y de situaciones un tanto absurdas para
divertirnos con ellas.
Pero con ella también aprendemos algo,
como la técnica que utilizan los jíbaros para la reducción de
cabezas. Es un tema que me suena de verlo en algún programa de TV,
pero que desconocía por completo la finalidad de esa extraña
tradición y cómo se podía llevar a cabo. Y que con una novela, se
aprenda algo, es un punto importante ¿verdad? No todos los libros
nos enseñan algo y este, aunque sea breve, lo hace. También hay una
teoría que explica el por qué de la alopecia en el mundo actual. Lo
que no me quedó claro es porque afecta principalmente al hombre y no
a la mujer.
Murió por los pelos es, ante todo, un
libro de humor. El protagonista, Manuel Cantera, trabaja de
funcionario en un Museo, que, preparaos que llegan curvas: ¡no está
abierto al público! Seguro que esta extraña situación os suena ¿a
qué sí? Es un Museo de Culturas donde llegan los funcionarios a sus
puestos y no tienen nada que hacer, simplemente esperar a que llegue
la hora de la salida. Llevan mucho tiempo así y la situación no
tiene pinta de cambiar. Con la crisis y los recortes, la apertura del
museo no parece muy cercana. Esta parte de la historia no me pareció
para nada disparatada: no hay más que darse una vuelta por lugares
como el aeropuerto de Castellón, donde todavía no ha salido ni un
vuelo (y eso que lleva años) o por tantos y tantos centros públicos
que no se sabe ni por qué están abiertos. Pero el caso que hay
gente currando en ellos y cobrando de las arcas públicas. “Typical
Spanish”, vamos, pero ya sabéis que “Spain is different”, qué
le vamos a hacer.
Y mientras se encuentra Manuel Cantera
sumido en una tarea que consiste en ver cómo pasan las horas, recibe
una llama telefónica de un Inspector de policía. Al parecer han
aparecido en Madrid 2 cadáveres de mendigos con las cabezas
cortadas. La policía sospecha que éstas han sido reducidas
siguiendo la técnica de los jíbaros y como Manuel es antropólogo
necesitan su ayuda.
Por otro lado, una importante empresa
de cosmética también contacta con Manuel, ya que sus miembros están
inmersos en la investigación de la alopecia y creen que la solución
se encuentra en esas cabezas, ya que mantienen su pelo intacto.
Manuel, al principio, sospecha que ellos son los asesinos, pero no es
así. Ellos quieren contratarlo para que viaje con los jíbaros y
sonsacarles los entresijos del proceso de reducción de cabezas. Todo
ello con los gastos pagados y un piso a cambio.
Manuel no se lo piensa 2 veces y acude
a la selva. Ahí empieza una aventura llena de pueblos indígenas,
espías, asesinos y venenos (uno de ellos luego apareció en mi
siguiente novela; para que luego digan que no existen las
coincidencias). Y, calvos, como no, ya que a ellos va dirigida la
investigación.
La novela es muy divertida y al menos a
mí me ha entretenido todo el tiempo. No es de las que te vas a reír
a carcajada limpia, pero si te saca alguna sonrisa que otra, sobre
todo cuando compruebas que muchas situaciones son reales como la vida
misma. Yo calificaría esta novela como una parodia en toda regla,
ya que muchas veces géneros tan serios como el policíaco o el
thriller, son parodiables en si mismos. En ella hay policías,
empresarios ambiciosos, espionaje, intrigas... pero todo llevado al
terreno del humor. Se puede decir que es una historia de aventuras y
aunque no llegue a los 200 páginas, ocurre de todo.
Pero no sólo es una novela de humor
con tintes absurdos, si no que, como os decía al principio, con ella
aprendemos algo de cultura. El autor, al ser antropólogo, está bien
documentado en cuanto a tradiciones se refiere y explica de una
manera entretenida cómo los jíbaros logran reducir una cabeza
humana como si de una muñeca fuera. A mí, de verdad, que me encanta
que en una lectura me enseñe algo que desconocía.
La narración es en primera persona.
Manuel Cantera cuenta su historia llegando a interactuar con el
lector. De esta forma empatizas más con él y te da la sensación de
que te la está contando a ti.
Manuel me ha caído genial. Al
principio te da la sensación de que su existencia es un tanto
anodina: un funcionario sin función, pero luego quiere ponerse el
mundo por montera. Su historia no pretende ser real, ni mucho menos.
Por eso no hay que desechar su lectura pensando que es una novela
inverosímil donde parece que al autor se le ha ido la pinza. Ya os
digo que es una novela que parodia a las novelas de acción.
CONCLUSION:
Es evidente que me ha gustado Murió
por los pelos. Es una novela que no pierde el ritmo en ningún
momento y que se lee en un suspiro. Ideal, por tanto, para cuando
viajamos en transporte público o si no queremos leer algo muy
pesado y largo. Os la recomiendo.
Otras reseñas de la lectura conjunta:
Irunesa: http://entuslibrosmecole.blogspot.com.es/2014/11/murio-por-los-pelos-de-nacho-docavo.html?spref=tw
Para comprarlo en Amazon:
Hasta ahora os está gustando a todos bastante, yo de momento creo que no me animaré con él
ResponderEliminarBesos
Ya sabes que estoy de acuerdo contigo. Una novela absurda, disparatada, una parodia, pero la mar de entretenida
ResponderEliminarBesos
Es la próxima que voy a leer, besotes
ResponderEliminarVeo que está gustando mucho este libro. Si me tropiezo con él quizás me anime.
ResponderEliminarBesotes!!!
Me ha gustado mucho. El martes sale mi reseña también.
ResponderEliminarBs.