Título: Fuímos Canciones
Autor: Elísabet Benavent
Editorial: Suma de Letras
Nº de Páginas: 544
Año de Publicación: 2018
ISBN: 9788491291596
SINOPSIS:
Macarena disfruta la vida a sorbos e intenta ser feliz.
Macarena tiene dos amigas: Adriana y Jimena.
Macarena guarda un secreto que deletrea a escondidas.
Ese secreto tiene tres letras: L-E-O.
Macarena no sabe que Leo está en Madrid.
Macarena teme, Macarena sueña, Macarena ama, Macarena vuela...
Y en este juego del destino intenta aceptar que lo que fuimos no puede ser lo que seremos...
¿O quizás sí?
IMPRESIONES:
Los que me seguís sabéis que soy adicta a las novelas de
Elisabet Benavent, más conocida como Beta Coqueta. La descubrí con su primera
saga: Valeria, que me encantó y a partir de entonces leí todo lo que publica.
Así que en cuanto vi que había sacado nueva bilogía decidí ponerme con ella.
Fuimos Canciones sigue la misma fórmula que todos los anteriores:
es la historia de un grupo de mujeres que son amigas entre ellas y que nos
cuentan sus amores, sus trabajos, sus inquietudes. Es decir, nos cuentan su vida.
Y ya os digo que me ha gustado, como siempre me pasa con esta escritora, pero
de momento no voy a seguir con la siguiente parte.
Esta vez la protagonista es Macarena, una chica que no está
contenta con nada de su vida: tiene un trabajo que no le gusta con una jefa
insoportable y en el amor tiene miedo a equivocarse de nuevo. Leo, es la parte
masculina de la historia. Es un personaje muy complejo y que igualmente puede
ser odiado o amado a partes iguales. Sin duda, el mejor personaje de todos.
Jimena es la alocada del grupo. Es con la que te ríes por su
forma de ser. Me ha encantado su historia del pasado que le ha dejado una
huella imborrable en el presente. Y, por último, está Adriana, la centrada del
grupo pero la que más arriesga al final. Parece que tiene una vida perfecta
pero luego no lo es tanto.
Como ocurre con las otras novelas de esta escritora, Fuimos Canciones
es una novela de personajes. Estos siempre están perfectamente definidos y con
ellos nos reímos, sufrimos, lloramos, nos emocionamos… Es lo que hace que estas
historias estén llenas de emociones con unos personajes con los que
empatizamos.
También son historias muy visuales que nos hace sentirlas
muy cercanas (da la sensación de que estamos dentro de los lugares).
El final me ha encantado y da pie ya a leer la segunda
parte. Pero como os decía al principio, no lo voy a hacer, de momento. No por
culpa del libro ni mucho menos sino que por cuestiones personales prefiero leer
otra cosa y cojerlo en otro momento.
CONCLUSION:
En cuanto acabe lo que estoy leyendo me pongo con él aunque
soy consciente de que últimamente mi vida lectora no es como la de antes y con
lo que se me viene encima no creo que mejore en absoluto. Aún así os lo
recomiendo, sin duda.