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martes, 11 de marzo de 2014

Reseña: La Tía Mame de Patrick Dennis


Título: La tía Mame 
Autor: Patrick Dennis 
Editorial: El Acantilado 
Nº de Páginas: 352 
ISBN: 9788492649563


Descubrí este libro hace años en una librería y enseguida llamó mi atención. Siempre lo quise leer, pero hacía tiempo que no me acordaba de él. Y como cuando quieres algo, al final eso va a ti, resultó que necesitaba un escritor con apellido que empezase por la letra D y no sé cómo fue, pero apareció La Tía Mame que cumple ese requisito. Una vez acabado, ya os digo que el libro no me ha decepcionado, aunque ha sido un poco diferente a lo que yo había pensado. Estas son mis impresiones. 

PATRICK DENNIS, EL AUTOR: 

Patrick Dennis (Evanston, Illinois, 1921 - Nueva York, 1976), seudónimo de Edward Everett Tanner III, fue un icono de la bohemia de Nueva York, además de uno de los escritores norteamericanos más populares de los años cincuenta y sesenta del siglo XX. La tía Mame, que había sido rechazada por diecinueve editores, vendió, al ser publicada en 1955, más de dos millones de ejemplares en Estados Unidos y se mantuvo ciento doce semanas en la lista de los diez libros más vendidos del New York Times. Dennis se convirtió en 1956 en el primer escritor en conseguir colocar en esa misma lista tres títulos, firmados con tres seudónimos distintos: La tía Mame, The Loving Couple: His (and Her) y Guestward, Ho!. En esta editorial han aparecido La tía Mame (Acantilado, 2010) y La vuelta al mundo con la tía Mame (Acantilado, 2013). 


SINOPSIS:
En este caso lo mejor es dejaros la sinopsis de la editorial, ya que considero que es totalmente acertada: Un niño de diez años queda huérfano en la poco edificante América de mil novecientos veinte y es puesto bajo la potestad de una dama excéntrica, obsesionada por estar à la page, vital, caprichosa, seductora y adorable. Junto a ella, pasará los siguientes treinta años en una espiral incesante de fiestas, amores, aventuras y diversos golpes de fortuna. El lector, atónito, suspendido entre la fascinación de advertir muchos de los risibles tics de su propia época y la carcajada explosiva de quien se ve arrastrado hacia un vertiginoso torbellino, vivirá lo cómico en todos sus registros, «desde el dickensiano hasta el pastel lanzado a la cara» (en ajustadas palabras de Pietro Citati). Y todo ello por obra y gracia de una de las tías más inolvidables que haya concebido nunca un escritor moderno, cuyo perfume sentimos flotar en el aire, con las lágrimas presentes aún en nuestros ojos, mucho después de haber cerrado el libro.

IMPRESIONES:

Lo primero que llamó mi atención de este libro fue la portada como siempre ocurre cuando me atrae un libro para que nos vamos a engañar. Soy de las que me entran las cosas por los ojos y cuando se refiere a lecturas, su portada representa para mí el 90 % de su éxito. Pero en este caso, además, creo que la portada da en el clavo con el contenido de la historia. En ella vemos a una elegante mujer vestida de manera glamurosa muy al estilo de los "twenties happy" con un vestido entallado y un cigarro con boquilla. Evidentemente es la Tía Mame a la que hace referencia el título de la novela y está cogiendo por la cabeza a un niño pequeño.

Precisamente es ese niño de la portada quien cuenta la historia de su vida. Se llama Patrick Dennis (como el autor, por lo que se puede intuir si no tendrá tintes autobiográficos la novela) y a través de una conocida revista de Estados Unidos nos empieza a contar la historia de su tía Mame. En esa revista hay un artículo que habla de una mujer muy especial y con una historia muy similar a la suya. Pero Patrick quiere demostrar que su tía supera a la del artículo con creces.

Patrick se queda huérfano de padre y madre con sólo 10 años y el único pariente cercano que tiene es una tía carnal con una vida muy atípica y poco recomendable para un niño de tan corta edad. La mujer no sabe mucho de niños y en principio se encuentra perdida. Cuando le tiene que llevar al colegio elige una escuela poco convencional que promete unos modernos métodos de enseñanza que en realidad son de denuncia y espero que no hayan existido nunca ni vayan a existir colegios así. De verdad que me quedé con la boca abierta cuando leí en lo que se basaba ese colegio. No sé si será imaginación del escritor, que espero que sí, aunque la realidad siempre supera a la ficción, ya sabéis.

Precisamente con este libro me he sentido perpleja muchas veces y hasta he sentido si al autor no se le estaba yendo la pinza. Por ejemplo, cuando Patrick cuenta lo que se encontró en la casa de su tía al ir la primera vez, me pareció algo incoherente y sin sentido. Si pretendía hacer reír al lector, conmigo no lo consiguió al menos (aunque ya sabéis que no soy de risa fácil cuando leo). A mí me resultó de lo más rocambolesco y me dio la sensación que el autor escribía por escribir cayendo en lo absurdo. Es cierto que hay un humor surrealista, pero en mi opinión en ciertas situaciones no lo consiguió. Con el colegio que os nombraba antes, cayó en la inmoralidad y con la casa de su tía, en la absurdez. Pero ya os digo que es mi opinión y esas son las irmpesiones que he tenido. Quizá sea que yo no le encontré la gracia.

Hasta la mitad del libro la protagonista absoluta es la tía y Patrick sólo cuenta que estaba interno en un colegio. A la tía le gusta el glamour y las apariencias y tiene infinidad de trabajos: lectora, redactora o dependienta de una conocida tienda de juguetes. Tengo que decir que es un personaje perfectamente dibujado y al que coges cariño. En el fondo es una mujer inocente e ingenua y que te gustaría darle un buen zarandeo ya que hay quien abusa de su buena fe.

A partir de la segunda parte, Patrick toma más protagonismo y la tía desaparece en parte de la escena. Parece ser que la obra fue traducida en principio por "Mi tía y yo" y creo que es el título más acertado, ya que en la novela tanto Patrick como su tía son protagonistas.

La época en la que se basa La Tía Mame es desde los años 20 hasta la Segunda Guerra Mundial. Es una época de incertidumbre y donde todo el mundo se huele una posible guerra. Los hechos políticos pasan de refilón y la novela está centrada básicamente en Patrick y su atípica tía. El final no es autoconclusivo, si no que acaba cuando el autor quiere pero es un final que me encantó. Son de estos finales en los que el lector puede seguir la historia como el quiera y así dejar volar su imaginación. Creo que hay segunda parte, pero no creo que la lea. Me gusta el final que tiene.

Aunque no es una novela redonda por los aspectos negativos que os decía al principio, la forma en que está escrita me pareció perfecta. Es un libro que no se hace pesado en ningún momento y los abundantes diálogos que encontramos en ella son de lo mejor que leí nunca. Son diálogos inteligentes y totalmente adecuados para los personajes. También es una novela genialmente ambientada y mientras la lees parece que estás viendo una película en blanco y negro de las de aquella época.
Otro fallo para mi gusto es la abundancia de localismos que hay en la novela. El autor hace demasiadas referencias a cosas conocidas en Estados Unidos, pero que aquí nos suena a chino y se pierde la gracia. Al final hay un glosario que nos aclara alguno de esos localismos, pero aún así el libro resulta demasiado localista en ese sentido. Eso sí, la revista que está leyendo Patrick y que hace de hilo conductor la conozco. Se trata de Reader's Digest y que en su versión española se llamó Selecciones. Estaba suscrita mi abuela y también otro pariente de mi madre la leía al trabajar un una empresa americana (o bueno de Estados Unidos). Es una revista de artículos, resumenes de libros, chistes y mucho entretenimiento. Al parecer todavía se edita y eso que comenzó su andadura en 1922. 

CONCLUSION:

Vuelvo a repetir que no me resultó una novela redonda y que le sobra alguna situación inverosimil, pero es una novela muy grata de leer. Posee una gran calidad literaria y no decae en ningún momento. MUY RECOMENDABLE.




7 comentarios:

  1. Me llama la atención, me la apunto, besotes

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  2. Mi cuñada tiene varios de esta editorial y llaman la atencion bastante por la portada :) se los tengo ya pedidos a ver cuando los recibo y cuales son los títulos, este no pinta mal

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  3. La novela quizá no me gustara por esos absurdos que comentas pero la portada es genial.
    Besos

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  4. Pues no sé, la verdad. Creo que lo que más me atrae es la portada. Esas cosas absurdas y que te descolocan, no sé yo si me convencerían...
    Besos

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  5. No sé, no sé... Me dejas con dudas en esta ocasión. Creo que esperaré a ver más reseñas para decidirme.
    Besotes!!!

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  6. La tengo fichada desde hace tiempo, tengo ganas de leerla =)

    Besotes

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  7. A mí me pareció un libro muy flojito, con un persistente tufo a "nuestra América es un gran país, aunque hasta su nombre trate de invadir continentes" y un feminismo algo trasnochado. La novela es autobiográfica, desde luego: la tía Mame se inspiró en la hermana del padre del autor, de nombre real Marion Tanner, que vivía como una loca excéntrica, en una casa de ladrillo rojo (en el 72 de Bank Street), también en el Village. Creedme que la amiga estaba como una regadera... El autor era bisexual (por mejor decir: heterosexual en la primera parte de su vida y homosexual en la segunda), siendo un activista de la boheme de Green Village y tuvo una infancia un tanto desordenada. Estas cosas se aprecian en su forma de escribir. O, al menos, yo las noto. A ratos es algo pedante, también. Y localista, desde luego. Aunque ya se sabe, América es el ombligo de América... Por otro lado, es divertida. Sin pretensiones. Yo creo que hay que leerla como se leería una película de sobremesa de las de Antena3. A mí la protagonista me parece una irresponsable de tomo y lomo. Pero eso ya son cosas mías.

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